Parashá Jayei Sará

Trabajando con la Energía de la Parashá Jayei Sará

Jayei Sará

La Parashá Jayei Sará —[translate:חַיֵּי שָׂרָה] (Las vidas de Sara)— abre con un aparente contraste: comienza relatando la muerte de nuestra matriarca, pero su nombre significa “las vidas de Sara”. Esto revela una enseñanza profunda: la verdadera vida es aquella que deja huellas más allá del tiempo físico. La influencia de Sara continúa a través de Isaac, de Abraham y de cada generación espiritual que sostiene su legado.

La vida que trasciende

Sara vivió plenamente cada etapa de su existencia, integrando cuerpo y espíritu, acción y fe. Su vida está descrita en tres períodos —cien años, veinte años y siete años— que representan diferentes niveles de pureza, sabiduría y plenitud. Los sabios dicen que “todas fueron igualmente buenas”, porque lo espiritual en Sara permanecía constante, más allá de los cambios del tiempo.

Esta energía nos impulsa a reflexionar: ¿cómo vivimos de manera que nuestra luz continúe después de nosotros? Jayei Sará nos enseña que la verdadera muerte es olvidar el propósito y que la verdadera vida consiste en mantener encendida la llama del alma a través de nuestros actos.

Lo que se debe trabajar esta semana

  1. El valor del legado

Abraham honra la vida de Sara al comprar con plena conciencia la cueva de Majpelá como sepultura. No actúa desde el dolor, sino desde la claridad espiritual de asegurar un espacio de continuidad. Esta semana, el trabajo interior es honrar lo que permanece y sembrar raíces para el futuro. Todo lo que hacemos con intención pura trasciende más allá de nosotros mismos.

  1. Decisiones guiadas por la fe

Abraham envía a su siervo Eliezer para encontrar esposa para Isaac. No interviene directamente, sino que confía en la divina providencia. Eliezer ora y observa las señales, hallando en Rivka la pareja adecuada. Este acto enseña la sabiduría de actuar con confianza y fe sin controlarlo todo. La invitación de la semana es abrir espacio a lo divino para que muestre el camino correcto.

  1. El alma que continúa en otros

A través de Isaac y Rivka, la energía de Sara continúa. Cada encuentro humano puede ser la continuación de una chispa anterior. Trabaja esta semana en reconocer en otros la herencia de bondad, fe o inspiración que te fue transmitida. Agradecer la vida que sigue viva en los demás mantiene el hilo del alma colectiva.

  1. Cierre y renacimiento

La parashá concluye con la muerte de Abraham, quien se reúne con Sara en la cueva de Majpelá. La unión final simboliza que lo sembrado en tierra da frutos eternos. La vida espiritual nunca se extingue; se transforma y se une a su fuente. Aprende a cerrar ciclos con gratitud, sabiendo que cada final es un nuevo comienzo en otro plano de conciencia.

Ejercicio espiritual sugerido

Durante la semana, dedica un momento para recordar a tus propios maestros espirituales o familiares que te hayan transmitido luz, valores o ejemplo.
En silencio, pronuncia sus nombres y siente que su energía sigue viva en ti.
Escribe una acción concreta que puedas realizar en su honor: un acto de bondad, estudio o ayuda a otros. El recuerdo sincero transforma la memoria en presencia y renueva el flujo de vida espiritual.

“Y fueron la vida de Sara ciento veintisiete años; estos fueron los años de la vida de Sara.” (Bereshit 23:1)

La Parashá Jayei Sará nos enseña que